Origen de la politica en la grada Italiana

 

"A guardia di una fede" es un ensayo escrito por Vincenzo Patané, fervoroso seguidor de la Roma. En el mismo, hay espacio para hablar del origen y de la evolución del movimiento ultra transalpino pero focalizado en los grupos de su equipo. Lo que os traemos a continuación es una parte del mismo, centrado en la política de los grupos italianos.

En Italia, la historia de los ultras tiene origen en la primera mitad de los años sesenta como seguidores no organizados pero que se encuentran en un contexto social y político que les hace estar muchas veces en primera línea, sobre todo siguiendo las ideas más radicales. En las tres decadas que siguen cambiará no sólo el modo de entender y de representar el tifo, sino también la confrontación existente en el mundo paralelo de la micro-sociedad de los estadios, un mundo hecho de política pero también de identidad radicada en las amistades y los enfrentamientos.El contenido simbólico presente dentro de los grupos politicos extra-parlamentarios comienza a fraguarse sin encontrar muchos obstáculos en el interior de las diversas curvas y los ideales de los años sesenta y setenta encuentran en los estadios una zona franca incontrolada y -hasta la muerte de Paparelli en 1979- incontrolable. Los diversos grupos de la Curva Sud, como los de otras curvas, tienen una impronta muy definida.

En 1972 se funda en la Curva Nord de la mano de Antonio Bongi, uno de los lideres de la hinchada romanista, el grupo ultra Boys-Le Furie Giallorosse, que se declara explicitamente declarado a la derecha y siempre en el mismo periodo el grupo Fedayn inaugura una pancarta rojigualda dando voz a los chavales que -al contrario- tenían ideales políticos de extrema izquierda. En esta nueva decada la República Italiana atraviesa uno de los periodos más duros de toda su historia. El conflicto se hace exasperado así como la lucha política de los partidos más extremos contra el centro de la Democracia Cristiana. Son los años de plomo y con ellos se asiste en calles, universidades y fábricas a la proliferación de grupos más o menos armados.El cuadro que da fondo al afiliarse a la escena del movimiento juvenil de parte de los grupos ultras esta hecho de sentimiento y rebelión. La juventud esta divida entre derecha e izquierda y por la calle se siente el fervor. Es inevitable, entonces, que la politica llegue poco a poco también a los estadios donde es todo un reflejo de lo que sucede afuera, mientras en un segundo momento se realiza la más sencilla de las formas de propaganda, sobre todo obra de la extrema derecha que ve en los "guerrilleros de las bufandas", chavales que en los años de la política radical llevan adelante una coherencia de valores y unos ideales precisos. Las curvas en aquellos años se autogestionaban de manera resolutiva y esencial. Se formaron en la Curva siempre más grupos y llegó gente que tenían como común denominador la Roma, pero también una misma creencia política.





Agradecimientos por este aporte en nuestro blog a la CURVA NORD CALI.